Coronavirus. La noticia sobre una nueva variante del Covid-19, esta vez de origen peruano-chileno, llamó la atención de los pobladores de ambos países debido a los numerosos contagios, la agresividad y los rápidos fallecimientos que produce.  

Todo empezó con el tuit colgado por el doctor Pablo Tsukayama, quien lidera el equipo de investigadores de la Universidad Cayetano Heredia (UPCH).  

En el mensaje utilizó un nuevo nombre o denominación “C.37”, se trata dijo de “un nuevo linaje (variante) de SARS-CoV-2 que parece expandirse rápidamente en Perú y Chile”.

Detalló que, la variante C.37 desciende de una variante llamada B.1.1.1.; diferente a la británica (B.1.1.7) y brasileña (P.1).

Uno de los aspectos que toma como referencia, es que, en el 2020 del total de genomas procesado, el 10% fue por el B.1.1.1

Sin embargo, en este año -entre enero y marzo- de los 123 genomas reportados, 50 corresponde a la nueva variante C.37 y solo tres a la variante brasileña.

DISCREPANCIAS

Entrevistado por los medios peruanos, Tsukayama cuestionó la información entregada por el MINSA a través del Instituto Nacional de Salud (INS), que identificó que el 39.7% de la variante en Lima era la brasileña.

Sin embargo, señaló que en la investigación realizada por el equipo a su cargo, solo detectaron que la variante brasileña está presente en el 2.9%, mientras que la nueva variante C.37 tiene presencia en cerca del 40.6%.

Explicó que, la diferencia habría sido porque el INS utilizó una alternativa de menor costo como la PCR, mientras que la UPCH sigue el secuenciamiento del genoma completo.

“C.37 y P.1 comparten la mutación ORF1a:3675-3677 y (en principio) darían el mismo resultado en esta prueba de PCR. O sea: es posible que muchas de las muestras identificadas como P.1 por INS sean realmente C.37”, sostiene Tsukayama en declaraciones publicadas por el diario Gestión.

Además del Perú, a fines de enero observaron casos de C.37 en Chile y EE.UU.

“En abril ya se reportan 160 en Chile y 133 en EEUU. Hoy la vemos en Argentina, Brasil, Ecuador, México, Alemania, España, Francia, Reino Unido y Australia”, indicó.

CONTAGIO

El investigador detalla que aún es preliminar determinar si es más transmisible o más virulenta y que para ello requieren seguir recolectando más datos y diseñar estudios para responder las dudas.

“Esto va a requerir tiempo, fondos y nuevas colaboraciones locales e internacionales”, expresó.

De la misma manera no se puede determinar si es responsable por el aumento de casos o el incremento de muertes en la segunda ola, que está convirtiendo al mes de abril en el más alto del año y el segundo mayor en toda la pandemia.

En el caso de las vacunas, si serían eficaces o no, depende también de los estudios adicionales que puedan realizar.